Foto: Aramis Fernández
Ya podremos reclamar por ustedes, exigir que se tengan en cuenta, castigar a quienes los maltraten. Ya nadie podrá atarlos a un árbol sin que puedan moverse, solo para exponerlos como ejemplares, en vez de hacerlos libres en su entorno natural. Esperemos ahora que la legislación no sea letra muerta y la fusta caiga sobre quienes los maltratan y no sobre los maltratados.