Desde lo más hondo del surco surge un hombre que fue tan cubano como las palmas, ¿Qué cosa digo yo?, fue tan cubano como la misma bandera, supo descifrar con su pluma el lenguaje campesino, ese que se ocultaba entre las paredes de la casa de yagua, en el silbido del camino real o en el cantar del sijú platanero, el sinsonte o la tojosa.
Por: Aramis Fernández Valderas
Tomás Álvarez de los Ríos; quien naciera el 28 de julio de 1918 en Guayos, reconoció en los isleños la raíz de lo más humilde y laborioso del campesinado cubano, en sus obras siempre se colaban los llegados de la siete isla, no era por casualidad, es que sin ellos no puede hablarse de la cultura agraria en Cuba, ellos comenzaban a pasar trabajo, desde que montaban en el vapor pero cuando llegaban a Triscornia era cuando la puerca torcía el rabo. El guayense falleció el 7 de noviembre de 2008.
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