El 5 de marzo de 2013, fallecía a los 58 años uno de esos hombres inmoribles, venerado por los más pobres y odiado por opositores y liberales por su confrontación con los más acaudalados. Tras trece años en el poder, Hugo Chávez consiguió que los más desfavorecidos se sintieran protagonistas de una política que durante décadas los tuvo olvidados. Redujo la pobreza de un 50% a un 27%.
Por: Lillipsy Bello Cancio
Chávez asciende, sin parar, consolidando un sitial simbólico reservado a los compañeros eternos. No para rendirle «culto a la personalidad», cosa que sería un insulto a la inteligencia. No para fabricar admiradores de oropeles… Hugo cumple una tarea revolucionaria desde su lugar de símbolo nuevo, porque camina hacia el socialismo, y nos compete a todos; eso no admite caudillos de vidriera porque sería frágil; porque no sería de todos…, porque sería una mentira.