La recogida del circulante superó los 2 890 millones de pesos, unos 550 millones más que lo planificado para el año. Disimiles alternativas se aplicaron para reanimar la venta y los servicios a la población
Gracias a las alternativas aplicadas por las distintas unidades para buscar mercancías a través de la autogestión en un año marcado por severas limitaciones, el sector del Comercio en Sancti Spíritus logró superar los ingresos económicos pactados para el 2023 y, al cierre de diciembre, la recogida del circulante, su principal misión, se comportó en el orden de los 2 800 millones de pesos, unos 550 millones por encima de lo previsto.
Así lo declaró a Escambray Ariel Luciano Fernández Martín, director del Grupo Empresarial del Comercio y la Gastronomía en la provincia, quien puntualizó que con la búsqueda de estrategias para suplir las afectaciones en recursos que antes se recibían mediante el balance se vencieron obstáculos para llevar nuevas ofertas de bienes y consumo a la población en general.
Explicó que entre las variantes comerciales aplicadas sobresalió una mayor presencia de productos de aseo en los Mercados Industriales y en otras unidades, así como de surtidos en la red gastronómica, tales como bebidas alcohólicas, refrescos, jugos, producciones cárnicas y otros alimentos, fruto del encadenamiento con mipymes, los trabajadores por cuenta propia y algunas empresas, abarcando en más del 80 por ciento los suministros al sector, sin los cuales resultaría imposible mantener tales ofertas.
Fernández Martín acotó que existen en la provincia más de 1 196 establecimientos vinculados a esta rama, de los cuales 570 son bodegas, 216 pertenecen a la red de Gastronomía, 35 están dentro del Sistema de Alojamiento y 52 se enmarcan dentro del Sistema de Atención a la Familia, pero no en todos los casos se cumple con lo establecido en cuanto a la búsqueda de alternativas locales para garantizar la actividad que realizan.
Puso como ejemplo los dos territorios más rezagados en su actividad comercial y en el desempeño de las prestaciones, en este caso Yaguajay y Fomento, los cuales, a pesar de cumplir con la recogida del circulante, no lograron buscar variantes para el perfeccionamiento en todas sus Unidades Empresariales de Base y evidenciaron ineficiencia en la formación de algunas de estas estructuras e, incluso, en la manera de aplicar la autogestión para que respalde el margen de utilidad previsto como parte del desarrollo económico en cada entidad.
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