Por: Aramis Fernández Valderas
¿Cuántas personas están trabajando en Cabaiguán? El número de personas en las colas es tan grande que prácticamente es imposible responder el cuestionamiento inicial.
Las tiendas dedicadas a la venta por pesos cubanos convertibles y con alguna mercancía para ofertar, son objeto de interminables hileras y varios pelotones de personas, la encargada del expendio de equipos electrodomésticos que venden en Moneda Libremente Convertible es objeto de visitas diarias a fin de que los clientes rectifiquen la cola, al menos esta vez están próximos a los 18 días del pase de lista.
Esta mañana salí por la Calle Valle y al llegar al Banco de Crédito y Comercio me encontré con un tumulto, estaban a la espera decenas de personas para obtener las tarjetas magnéticas, unas para las balas salvas y otra para las trazadoras, como denomina a las monedas Ruperto, el personaje del espacio televisivo Vivir del cuento.
En el establecimiento financiero, otorgan un número limitado de estas tarjetas y la demanda es en extremo grande en este municipio y cada día recibe un número limitado de solicitudes, por tanto, los que hoy no pueden, volverán mañana y nuevamente faltarán al trabajo o llegarán tarde al mismo.
Pero al mirar a la derecha de la entidad bancaria, otra cola, esta superior a las descritas, es la del pan que otrora le llamábamos de cinco pesos, la aglomeración es una película no apta para menores, ni cardíacos, mucho menos para quienes no desean contraer el Covid-19.
La radio local en su revista informativa de la mañana ofrecía la nota de emplear la libreta de abastecimiento para la venta de los productos que se ofertan en Pesos Cubanos Convertibles, noticia que saldrá de manera íntegra mañana en esta web, la cual ha sido una solicitud de gran parte de los cabaiguanenses, `pero ante lo que pude apreciar a la salida del sol de este 26 de agosto, las autoridades tendrán que continuar manejando fórmulas porque no es solamente en esos mercados, ni donde se venden únicamente productos alimenticios la acumulación de personas de manera cotidiana.
Tendríamos que observar otro día lo que sucederá en la tienda “El Álamo”, la cual desde ayer opera en Moneda Libremente Convertible, aunque a decir verdad, no espero un comportamiento tan distinto al ya descrito en el resto de las unidades comerciales.
De vuelta a la emisora y en respuesta a mis compañeros de trabajo acerca de cómo estaba la calle, solo atiné a responder, “Mis amigos, Cabaiguán es una cola”