Por: Alexey Mompeller Lorenzo
Varias jornadas sin reportar casos de la COVID-19 no libran a Cabaiguán de la pandemia y si bien durante la última quincena decrecieron los diagnósticos y la tasa de incidencia bajó la semana anterior a 7,6 por cada 100 mil habitantes, mejor no tirar la toalla cuando el 80 por ciento de los pacientes cursan asintomáticos la enfermedad.
De las 48 personas contagiadas que acumula el territorio en el rebrote donde se han realizado más de 600 PCR, Guayos se declara el epicentro con 22 confirmaciones, los más recientes pertenecen a ese consejo popular con un foco sumamente activo en un edificio radicado en Elcire Pérez, uno de los dos todavía abiertos aquí.
Según Armando Ulloa Martínez, director de la Unidad Municipal de Higiene y Epidemiología, las dos áreas urbanas de salud de la ciudad cabecera cabaiguanense tampoco quedan ausentes del SARS-coV-2 al registrar entre ambas 26 casos.
Ya se contabilizan 35 altas clínicas, el índice de sospechosos y contactos de positivos disminuye con 5 y 30 cabaiguanenses en vigilancia respectivamente, sin embargo el riesgo persiste y aterrizar en la nueva normalidad dependerá de cuánto mengüen las cifras de infectados.
En la aparente mejoría que puede cambiar en 24 horas, Ulloa Martínez apuntó que solo se mantienen habilitados dos centros de aislamiento, uno en la escuela pedagógica Vladislav Volkov en Tres Palmas y el otro en la Estación Provincial para la Investigación de la Caña de Azúcar.