Foto: Aramís Fernández
Lugar ubicado en la Carretera que une a Cabaiguán con el poblado de Santa Lucía a poco menos de 400 metros del cementerio local, sitio en el que el despedidor de duelos dice algunas palabras (Siempre buenas) sobre el difunto para que la caravana mortuoria continúe rumbo al campo santo, últimamente se viola la tradición ya pocos despiden duelos y el auto que lleva al fallecido sigue sin parar hasta la necrópolis.
Sindo Pacheco me dijo en una entrevista, que él prefería que cuando por allí pasara y eso será allá por el año tres mil y pico, que su deseo no era que le despidieran el duelo en el puente, sino que lavaran su cuerpo en el riachuelo para que el agua se llevara las impurezas acumuladas en la vida.