Nunca pensó la maestra y combatiente del Movimiento 26 de Julio, Antonia María Hernández López, que su intención de reconocer al Che como Hijo Adoptivo de Cabaiguán perdurara en el tiempo y dignificara tanto a este pueblo.
Por: Daisy Martín Ciriano (Museóloga)
Su idea fue acogida con prontitud por René Dorta Serrano y demás miembros del recién creado Ayuntamiento y con rapidez le fue cursada la invitación al destacado jefe guerrillero.
Según recoge la historia la primera estadía del Che en el territorio villareño, fue en Fomento, donde también fue reconocido, aunque del momento no se recogió la impronta.
Del sencillo acto realizado en Cabaiguán, el 8 de febrero de 1959, se guardan varias fotografías. Precisamente, Dolores Dorta Serrano, hermana del Comisionado, conservó con celo las fotos originales, las que se reprodujeron en el 2007 y se colocaron en la sala 7 del Museo Municipal.
Incluso en ellas aparecen varias personas que ascendieron la escalinata del edificio y participaron en el acto, junto a combatientes, médicos, colaboradores de la lucha recién concluida y representantes de la población que quisieron presenciar el homenaje, aunque en el espacio del parque y las aceras se congregaron también numerosos cabaiguanenses.
Una réplica del pergamino le fuera entregado ese día, fue donada por Aleida March al Museo y desde entonces allí se expone, junto a una boina y varios objetos del insigne comandante.
Por estos días nuevamente este hecho ha servido de base para recordar su figura y vivificar la historia. Hurgar cada día más en nuestras luchas y sacrificios es rendir homenaje diario a nuestros héroes y mártires.
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