Por: Alexey Mompeller Lorenzo
Sustituir el empleo de químicos por un abono orgánico a favor del cultivo del tabaco y que resulte más rentable para el productor une a especialistas de la Estación Experimental del Tabaco de Cabaiguán con otras instituciones del país responsabilizadas en garantizar los rendimientos de cada campaña.
“En la búsqueda para prescindir del Bayfolan Forte, fertilizante importado, encontramos un reemplazo de factura nacional. Apostamos por el FitoMas E gracias al trabajo que realiza nuestra entidad de conjunto con su homóloga de Pinar del Río y el Instituto de Investigaciones del Tabaco”, señala la Máster en Ciencias Ismaray Gato Martínez, jefa de Proyectos e Investigaciones en este centro.
Según la experta, la tecnología amigable con el medio ambiente y aún en fase de prueba, “presenta muchas semejanzas entre los resultados que se alcanzan con el uso de ambos productos. Sobresale el ahorro considerable al bolsillo del veguero de utilizar el segundo compuesto natural y no el primero. El litro de Bayfolan Forte se expende a 15 pesos y el de FitoMas E a 6 pesos”.
Fundamentalmente glucosas y encimas se incluyen entre los compuestos del FitoMás E, biopreparado obtenido de la producción de azúcar, capaz de ofrecer energía a la planta, precisa Gato Martínez.
“Posibilita que la solanácea se adapte y se desarrolle de manera óptima en condiciones adversas asociadas a la falta de riego, el exceso de agua y la hace más resistente a las plagas y enfermedades”.
La Estación Experimental del Tabaco de Cabaiguán donde se logran los tipos de semillas original y básica de las variedades plantadas en Cuba lidera demás actividades en la región central; el extensionismo agrícola y servicios científico-técnicos de implementación y asesoramiento.