En el potencial de personas naturales se concentran los atrasos, cuando el 53 por ciento de esos contribuyentes faltan por saldar el pago que expira el próximo 30 de septiembre
En la recta final del pago del impuesto sobre el transporte terrestre, a Cabaiguán le queda rueda por dar para cumplir con esta obligación fiscal que expira el 30 de septiembre.
Según Yaquelín Pérez Hernández, subdirectora de la Oficina Nacional de la Administración Tributaria (ONAT) en el municipio, los contribuyentes estatales llevan la delantera al saldar su deuda casi la totalidad de los 103 inscritos y a 25 de ellos le restaron el 20 por ciento del importe a liquidar, bonificación ofrecida por hacerlo antes del 1 de marzo.
La otra cara de la moneda son las personas naturales que conducen por la vía de la morosidad cuando el 53 por ciento de ese potencial ha hecho efectivo el pago de la chapa a solo jornadas de cerrar el plazo permitido.
“De los 3 223 transportistas del sector residencial contemplados en los registros de la ONAT, 1 268 aprovecharon las bondades por pronto pago. En tanto, del impuesto sobre embarcaciones, de los siete propietarios, hasta la fecha cinco desembolsaron lo dispuesto en ley”, especificó la fuente.
La funcionaria recordó que al emplear los canales de pago electrónico, el contribuyente recibirá un 3 por ciento de descuento, plataformas con totales garantías y útiles en el contexto epidemiológico.
Vencido el término para abonar la cuota correspondiente, Pérez Hernández señaló que asumirán las sanciones establecidas. “Recargos en dependencia de los días de retrasos y multas que oscilan entre 100 y 500 pesos, de acuerdo al nivel de incumplimientos”, concluyó la especialista.