La Campaña de Alfabetización en Cuba resultó ser una de las hazañas más encumbradas de la Revolución por lo que significó para muchos cubanos que no sabían leer ni escribir
Por: Daisy Pilar Martín Ciriano
Cuando han transcurrido más de sesenta años de desarrollarse la epopeya de la Campaña de Alfabetización en Cuba, resulta muy especial reencontrarse con alguno de los alfabetizadores de aquel momento. Muchos de ellos eran casi niños y sin embargo fueron a las montañas, los llanos y rincones del país con su farol y la cartilla. Importante papel les correspondió a los padres, que autorizaron a sus hijos a emprender aquella tarea. Hoy muchos de ellos no están. Otros no recuerdan, mientras que los menos aún vibran de emoción al narrar sus vivencias o escuchar el himno de la alfabetización.
Aunque muchos de ellos ya no están, su legado y su obra permanece viva y su esfuerzo glorificó, aún más, la obra de la Revolución.
Ante el llamado de Fidel se constituyeron brigadas en todo el país. En este pueblo se incorporaron numerosos jóvenes, entre ellos tabaqueros y obreros de otros sectores, así como amas de casa. Unos se adentraron el propio territorio, mientras otros, escalaron montañas y atravesaron senderos para llevar en zonas lejanas la cartilla y el manual.
El Museo Municipal atesora gran cantidad de objetos de aquel momento. El maestro y también directivo de la Campaña, Oscar Rodríguez López, se encargó de preservar la documentación y pertenencias de muchos brigadistas: cartillas, libros, planillas, fotos, faroles, libretas y banderas, engrosan hoy las colecciones de la institución.
Inspirado en la plausible labor de estos hombres y mujeres se realizaba anualmente una actividad de homenaje a los alfabetizadores a la vez que se escuchaban sus vivencias, se entonan marchas y se recordaban momentos que hacían brotar lágrimas de emoción. Siempre este encuentro era muy esperado por todos. Hoy, solo se puede recordar su proeza, comentar de su testimonio, pero ya las fuerzas no los acompañan para trasladarse hasta la institución, los que aún se encuentran lúcidos ya sobrepasan los ochenta años y, el tiempo es implacable.
Pero, desde esta página y con esta foto, se recuerda uno de los encuentros más numerosos que se efectuó en ese lugar donde aparecen numerosos directivos de la Campaña como fueron Oscar Rodríguez López, Mario Rodríguez Valero, René Dorta Serrano, Amable Reina Obregón, Gladis Gallardo Maldonado, Anastacia Guerra Concepción, Deisy Machado Padrón y Delia Plasencia Concepción.
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Gradúa Centro Universitario de Cabaiguán primeros técnicos Superiores en Trabajo Social