Por: Alexey Mompeller Lorenzo
Las precipitaciones causadas por Eta apenas mojaron a Cabaiguán y una vez asomado el sol, en el campismo Arroyo Lajas solo se habla de recuperación para devolverle la vitalidad al establecimiento que recibirá a los vacacionistas cuando el municipio se encuentre en la nueva normalidad.
Anixerdi Portal Jiménez, máximo representante de esta base, confirmó que el paso de la tormenta tropical no reportó ninguna afectación en un centro recién remozado y aprovechan la pausa turística para la limpieza de las áreas verdes y la higienización de las cabañas, el restaurante, la parillada así como los espacios de ocio.
Según Portal Jiménez el camino de acceso a Arroyo Lajas resulta más intransitable después de las escasas lluvias registradas y ello no es novedad en una infraestructura vial que muestra la imagen del deterioro ante las retardadas labores de remozamiento.
Aunque desde hace varios meses la instalación propicia para mantener la cercanía con la naturaleza no permanece disponible para campistas de la provincia, fundamentalmente, porque en el rebrote de la COVID-19 acogió a voluntarios de la región espirituana que asistieron a sospechosos y contactos de casos positivos de la enfermedad, previo al azote del fenómeno tropical ya habían desinfectado los lugares, acciones sanitarias avaladas por especialistas de Salud Pública de la localidad.
El funcionario dijo que superada la fase de transmisión autóctona limitada en el territorio, volverán a comercializarse las capacidades y quienes reserven deberán cumplir con los protocolos de bioseguridad para evitar posibles contagios del SARS-cov-2.