Por: Alexey Mompeller Lorenzo
Por más que el bloqueo comercial y financiero impuesto por los Estados Unidos intenta asfixiar a Cuba, la economía cabaiguanense resiste a los mecanismos desestabilizadores y en 2019 se mantuvo sostenible.
El crecimiento de los principales indicadores no cedió ante las limitaciones de la coyuntura energética, momento en que el ahorro y la racionalización de recursos todavía constituyen palabras de orden para enfrentar el hostigamiento imperial.
José Ángel Cruz Rodríguez, director municipal de Economía y Planificación, puntualiza que las ventas netas se enmarcaron en un 104, 3 por ciento; el valor agregado bruto ascendió al 309, 5 por ciento y el plan de utilidades se sobre cumplió en un 12 por ciento.
“Si bien la circulación mercantil mayorista quedó un 5,4 por ciento por debajo de lo planificado; la circulación mercantil minorista culminó al cierre de noviembre con un 3,5 por ciento por encima de los 6 millones 49 mil pesos acordados”, dijo Cruz Rodríguez.
El desafío para el 2020 consiste en continuar aumentando las exportaciones en renglones como el tabaco torcido, una de las vías generadoras de ingreso al territorio. Según la fuente, del compromiso pactado solo se logró el 74, 4 por ciento y en valores esa cifra apenas superó los 59 millones 915 mil pesos muy por debajo de lo previsto.
La sustitución de importaciones, factor decisivo para el impulso de la economía, exhibió números discretos en la entrega de carne y leche vacunas a la industria; revertir ese comportamiento con el aumento en la producción de cultivos varios, algunos parámetros incumplidos en este período, inyectaría vitalidad a las finanzas cabaiguanenses. Asimismo incidió la disminución en un 62, 2 por ciento en la manufactura de aceites básicos que incluye el dieléctrico para transformadores de hasta 13,8 Kv motivada. ¿La causa? “Ese incumplimiento esta dado fundamentalmente por la insuficiente entada de bidones para el envasado del surtido”.
A tono con la actualización del modelo económico cubano, se aprobaron una serie de medidas, entre ellas el incremento salarial al sector presupuestado que benefició a los cabaiguanenses.
Referente al plan de reparación y mantenimiento, Cruz Rodríguez señaló que las acciones ejecutadas concluyeron al 83, 1 por ciento, destacándose la Industria Alimentaria que acometió todas las obras acordadas en el calendario.