Tomado de Escambray
Este sábado toman posesión de sus cargos la gobernadora Teresita Romero Rodríguez y el vicegobernador Frank Osbel Cañizares, electos el pasado 18 de enero
Según lo establece la Ley Electoral, este 8 de febrero tomarán posesión de sus cargos la Gobernadora y el Vicegobernador de Sancti Spíritus, electos el pasado 18 de enero.
Durante esa jornada los delegados de base eligieron como gobernadora a Teresita Romero Rodríguez, diputada al Parlamento cubano que se desempeñaba como presidenta de la Asamblea Provincial del Poder Popular, y durante su permanencia como dirigente gubernamental ha transitado por los diferentes niveles de dirección. De igual manera seleccionaron como vicegobernador a Frank Osbel Cañizares Rodríguez, quien fungía como vicepresidente del máximo órgano de Gobierno en el territorio.
Este acto de toma de posesión se realiza formalmente ante un representante del Consejo de Estado designado al efecto, y queda constituido, además, el Consejo Provincial del Poder Popular, integrado por la Gobernadora, el Vicegobernador, los presidentes y vicepresidentes de las asambleas locales del Poder Popular y los intendentes de los municipios.
Con la constitución de los gobiernos provinciales, según lo planteado en la Disposición Transitoria Cuarta de la Constitución de la República de Cuba, cesa entonces en sus funciones la Asamblea Provincial del Poder Popular.
De acuerdo con los principios constitucionales, el Gobierno Provincial tiene como misión fundamental el desarrollo económico y social del territorio, y entre sus responsabilidades figuran aprobar y controlar, en lo que le corresponda, el plan de la economía y el presupuesto de la provincia, adoptar acuerdos en el marco de la Constitución y las leyes; orientar y coordinar las actividades políticas, económicas, culturales, científicas, sociales, de la defensa y el orden interior, que por el Estado se dispongan y evaluar los resultados de la gestión de las administraciones municipales y aprobar las acciones a realizar.
Esta nueva estructura de Gobierno presupone un salto en la institucionalidad, lo cual debe revertirse en mayor efectividad de la gestión en beneficio del pueblo, lo cual constituye el gran reto de quienes tienen sobre sus hombros, a partir de hoy, la administración de la provincia.