Los cabaiguanenses comenzamos a caminar sobre la cuerda floja de la NUEVA NORMALIDAD. En manos de cada ciudadano, en su conciencia y modo de actuar quedan las principales responsabilidades para que este período sea duradero y no nos caigamos de nuevo al precipicio
Por: Aramis Fernández Valderas
Con un curso escolar ya iniciado, a partir de este primero de noviembre se efectuará la apertura, con limitaciones de centros gastronómicos, transporte y los centros laborales poco a poco irán llenando todas las capacidades. Esperemos la cooperación de cada cual, de todas maneras insisto, aún la COVID-19 no está muerta ni enterrada.