Chury poseía las medallas de la lucha clandestina, la de TREINTA Y CUARENTA años de las FAR, la de fundador de los CDR y las Milicias, la medalla Pedro Marrero y fue fundador del Partido en Cabaiguán.
Por: Hugo Crespo Crespo
Jesús Rodríguez García, más conocido por Chury, nació en Cabaiguán el 6 de julio de 1932. Sus padres Francisco y Cirila naturales de Pinar del Río, tuvieron un total de 8 hijos, 4 hembras e igual cantidad de varones.
Los primeros años de vida de Jesús o Chury fueron muy difíciles, pues quedaron huérfanos de madre cuando él tenía 5 años, por lo que tuvo que realizar varias actividades para apoyar el sustento familiar como limpiar zapatos, cargar maletas en piqueras, repartir cantinas en escogidas, regó posturas de tabaco y laboró en despalillo de forma clandestina ya que no poseía la edad requerida y cocinó para sus hermanos mayores en una barraca en La Esperanza en los cortes de caña.
A los 9 años, comenzó sus estudios por primera vez en la Escuela Presbiteriana de Cabaiguán por el valor de 1.50 centavos mensuales. A los 5 meses aproximadamente de estar en este plantel le iban a proporcionar la baja por su situación económica, pero la directora de la escuela llegó a un acuerdo con la familia para que su papá a cambio atendiera el huerto y él pudiera continuar los estudios.
A los 14 años, Jesús o Chury, cursó el SEXTO grado, e hizo un curso preparatorio y exámenes para el Instituto de Segunda Enseñanza de Sancti Spiritus, para lo cual aprobó el ingreso pero no pudo continuar estudiando por falta de recursos económicos, incorporándose nuevamente a los cortes de caña de Camagüey hasta terminar la zafra en Punta Alegre.
Jesús o Chury, trabajó de peón de albañil en Santa Clara y después regresó a trabajar en Cabaiguán con un hermano mayor que le había enseñado el oficio de camionero.
Al producirse el golpe de Estado de 1952 Jesús Rodríguez García, tomó la línea de la insurrección. Fue miembro de la juventud ortodoxa e integró las primeras células clandestinas junto a Félix Hurtado, Lázaro Fernández, Baldomero Moreira y Fabián Castro. Participó en la ocupación del ayuntamiento municipal y en la huelga contra las máquinas torcedoras.
Junto a Ramón Cabrera, El barberito, recibió la orden de constituir el Directorio 13 de Marzo en Cabaiguán, organización la cual apoyó todo el proceso de la lucha insurreccional y la llegada del Che al territorio. Después junto a un total de 25 compañeros, entre ellos dos mujeres, fue el segundo jefe del Comando 13 de Marzo, grupo que tenía la misión de continuar apoyando las medidas del gobierno revolucionario después de la liberación del poblado, en la intervención de bienes malversados, entre ellos garajes y expendios de gasolina.
Chury también formó parte de las milicias de la fábrica Bauzá y posteriormente se infiltra en las bandas contrarrevolucionarias que operaban en el Escambray y fue nombrado jefe de milicias.
Jesús Rodríguez García, trabajó en las zafras azucareras en el central Reemberto Abad Alemán Rodríguez, laboró en el Ministerio de la construcción, fue secretario de asuntos sociales, jefe de comisión de evacuación de la defensa civil. Además fungió como administrador de la fábrica de refrescos y director de la empresa de bebidas y licores, fue administrador del combinado Alimenticio Río Zaza e inversionista de la construcción hasta su jubilación.
Chury poseía las medallas de la lucha clandestina, la de TREINTA Y CUARENTA años de las FAR, la de fundador de los CDR y las Milicias, la medalla Pedro Marrero y fue fundador del Partido en Cabaiguán.
Además Jesús Rodríguez cursó estudios en la Escuela de Instrucción Revolucionaria, del poder local y dirección y planificación de la economía.
Fungió además como presidente del CDR, Secretario de núcleo zonal y laboró por dos años en la sede municipal del Partido en la atención a la población.
Este 11 de enero de 2025, Chury se despide de sus familiares, de sus vecinos y compañeros de lucha, llevándose consigo un ejemplo de hijo, esposo, padre, abuelo y amigo ejemplar.
Un hombre que nunca buscó prebendas y que siempre quiso estar en el anonimato, sin presumir toda la grandeza de su vida y su obra. Alguien que llevó en sí los mejores valores humanos forjados con tenacidad, trabajo honrado y esfuerzo ante los avatares que la vida le impuso desde muy temprana edad. Jesús Rodríguez García, Chury, siempre estará en la lista de los libertadores de este pueblo.
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