viernes, noviembre 22El Sonido de la Comunidad

El 2019 ha sido escenario de no pocas batallas: unas vencidas… otras no tanto pero seguro de que vamos por más

El 2019 fue un año signado por la constante escasez de recursos y materias primas, en el que el combustible ha puesto de rodillas la consecución de casi todos los objetivos de la economía cabaiguanense y en el que quedó demostrado una vez más que la creatividad y el compromiso pueden ser la solución a no pocos de los males que aquejan a nuestra sociedad.

El cumplimiento de un plan de circulación mercantil superior a los 180 millones de pesos (uno de los más ambiciosos de la provincia), el mantenimiento de una tasa de mortalidad infantil en cero, el ahorro de energía y el cumplimiento de los planes de siembra y producción de alimentos constituyen los logros más sobresalientes de estos últimos doce meses aquí.

Cabaiguán sigue siendo un municipio superavitario, pues a pesar de que no se alcanzaron las cifras previstas con respecto a los ingresos cedidos vaticinados, se lograron ingresar 42 millones de pesos más que en 2018. El año cerrará  a un 64% en este indicador.

El incremento salarial que benefició al sector presupuestado a mitad de año obligó a las entidades del territorio a adoptar medidas que impidieran un sobregiro en este sentido, gracias a lo cual se logra que hoy el presupuesto concluya a un 99.6%de su ejecución.

Más de cuatro millones 500 mil pesos fueron destinados en este municipio durante 2019, a beneficiar por la vía del subsidio a familias, con problemas de viviendas o necesitadas de consumar acciones constructivas para mejorarlas, entre las cuales destacan treinta mujeres con tres hijos o más, como parte de la implementación del programa gubernamental que da respuesta a la dinámica demográfica del territorio. Esto, además de que se trabajó en la rehabilitación de viviendas aisladas y la readaptación de locales.

En Cabaiguán nacieron 497 niños este año (42 menos que en 2018) y todos fueron vacunados según el esquema previsto para estos fines. En el período decreció el número de adolescentes y de mujeres mayores de 40 años embarazadas y sólo 19 pequeños nacieron con bajo peso. No se tuvo que lamentar la pérdida de la vida de ningún niño ni de su madre, lo cual, junto al sobrecumplimiento del plan de donaciones de sangre, devienen indiscutiblemente los resultados más loable del sector en el período que está por concluir.

La situación higiénico- epidemiológica de la cabecera municipal y Guayos mantuvo en vilo a las autoridades sanitarias y gubernamentales de la localidad, pues seis focos de caracol gigante africano y una constante presencia del mosquito Aedes Aegyptis obligaron a los especialistas a implementar, renovar y consolidar estrategias que les permitiera el control del vector y los moluscos en cada una de las áreas identificadas.

El sistema educativo cabaiguanense también se desarrolló este año, al punto que el municipio alcanzó la condición de Destacado a nivel provincial, con todos los indicadores que respaldan cada proceso sustantivo evaluados de Bien o Muy Bien, 161 docentes reincorporados a las aulas, más de medio centenar de recién graduados de varias especialidades que integraron la hornada de profesores cabaiguanenses y un proceso de informatización que avanza en función de lograr mayor calidad del aprendizaje.

En el caso de la Refinería de Petróleo “Sergio Soto” de Cabaiguán, la más emblemática industria de este pedazo de Cuba, cierra el año con resultados positivos a partir del cumplimiento de la mayoría de sus indicadores y planes de producción: 70 mil 581 toneladas de crudo nacional refinadas, la producción de 33 mil 888 toneladas de líquido asfáltico 50-70 prototipo AC-30 y 723 toneladas de líquido asfáltico diluido, además de aceite transformador, así como el mejoramiento de las condiciones de los hornos F 101 y F 102 de las unidades de destilación atmosférica y al vacío que permiten la destilación del crudo cubano y el montaje de una nueva torre de destilación, son solo algunos de ellos.

Asimismo, apenas inició el 2019 la cultura cabaiguanense se tambaleó. Un daño económico considerable puso en crisis al sector, sin embargo las limitaciones no frenaron a artistas y creadores y su vanguardia confirmó cuántos quilates pesa cuando de garantizar recreación sana a los públicos se trata.

En la etapa, las instituciones pertenecientes al medio mantuvieron una programación constante, aunque los espectadores no siempre ocuparon la mayoría de los asientos. No obstante, a La Cabaña la inundaron versos y prosas con tinta cabaiguanense, varios hijos de esta tierra recibieron altísimos reconocimientos ysi de Programas de Desarrollo Cultural, se habla el proyecto socio- cultural “El patio de Tila, resulta un referente de cuánto puede lograrse.

Hay quienes dicen que Cabaiguán es pueblo con suerte, otros se ocupan de honrar el verso de nuestro cantor cuando lo llamó “Mi lindo Cabaiguán” y no pocos se empeñan diariamente en mantener el calco que lo sitúa entre los pueblos más prósperos de esta Isla Bella. El 2019 ha sido escenario de no pocas batallas: unas vencidas… otras no tanto y un gran número que queda pendiente para venideras etapas de trabajo. En la voluntad, el compromiso y el sentido de responsabilidad de su gente, así como en la constancia y capacidad creativa de sus dirigentes está la clave del éxito. Lo que sí es seguro es que pensando como país, aquí vamos por más.

Compartir:
Salir de la versión móvil