viernes, noviembre 22El Sonido de la Comunidad

El Chino, más de 50 años entre números y estadísticas

Chino por sus facciones, pero tan cubano como las cañas, José Castañeda Martínez, se despide de su vida laboral activa tras desempeñarse por más de medio siglo entre la estadística, los números y la banca cubana

José Castañera Martínez, el chino ,se despide de su vida laboral
José Castañera Martínez, se despide de su vida laboral.

Por: Hugo Crespo Crespo

Para alguien que se despide de su vida laboral activa, con más de 50 años de desempeño constituye ante todo un regocijo por la huella dejada. Así Juan José Castañeda Martínez, o “El Chino”, desde 1967 a la fecha, tiene historias para contar entre sumas, restas, divisiones, multiplicaciones y estadísticas. En cada sitio por donde ha marcado un tiempo ha constituido un baluarte para la entidad que lo tuviera como empleado.

Seriedad, respeto, constancia y sobre todo sentido de pertenencia hacia lo que realiza lo llevó siempre a ser reconocido y tener en cuenta para discernir procesos y acometer las más necesarias y urgentes tareas que definieran en logro de un objetivo.

Fue en la fábrica de caramelos en Guayos donde comenzó en 1967 a darle el dulce exquisito a sus triunfos, después en 1973 en el poder local hasta la nueva división política administrativa en que Guayos dejó de ser término municipal.

Entonces pasa a laborar en la Oficina Nacional de Administración Tributaria en Cabaiguán, le ofertan trabajar en el Banco Nacional de Cuba en 1977 hasta la creación del Banco Popular de Ahorro en 1983, ocupando diferentes plazas y cargos, desde la base hasta la dirección, así supo y sabrá de cajero, auxiliar de contabilidad, administrador del banco y gerente contable.

Se jubila el chino, que constituye toda una enciclopedia para esta labor, una referencia para las presentes y futuras generaciones, alguien que sabemos se despide de la vida laboral activa pero sus conocimientos siempre estarán dispuestos a abrir sus valiosas páginas de la experiencia para compartirlas con aquellos que llegan o los que están, con esos que has compartido y has formado una familia laboral que siempre te tendrá en un lugar bien preferencial cuando de personas que han dejado una huella positiva en el tiempo se trata.

Y ese ha sido y será Juan José o El Chino, a quien tendremos presente ante las difíciles pruebas que la profesión pueda darnos. El del Banco Popular de Ahorro de Cabaiguán, lo despide, pero recuerda que esta será casa, quizás la primera, donde estuvo mucho tiempo. Otras tareas familiares reclaman de sus esfuerzos, pero aquí deja no a compañeros, sino a hermanos que exclamarán el algún momento ante cualquier persona que pregunte por él que sólo ha salido un instante, pero que en cada uno de ellos está latente su presencia.

Por eso en él cada uno tendrá una oportunidad para seguir por los caminos que aquí dejó trazados. Disfruta tus venideros años,Chino, con la pasión y la entrega de que cumpliste un sueño y fuiste útil a tu familia y a la sociedad y sobre todo que cumpliste con tus propios preceptos.

Este colectivo te pide que nunca los olvides, porque aquí quedan esos cuerpos y almas, que junto a ti formaron el magnetismo más exacto para engrandecer el valor de la amistad y el compañerismo. Pobre del hombre que no deje una impronta segura en la tierra, sería como una sombra frívola, pero tú dejaste una luz y en ella muchos, hoy y mañana, seguros tendrán su guía cuando la profesión bancaria se abra camino al andar; y en esta ruta siempre habrá un nombre José Juan Castañeda Martínez, o El Chino.

Los noveles trabajadores bancarios y los estadísticos deben tener en El Chino un paradigma a seguir, para como él ganar la confianza de toda la sociedad cubana en los tiempos que vivimos.

Compartir:
Salir de la versión móvil