En esta finca de semillas se cultivan diversas plantas proteicas que benefician a unidades productoras de la Empresa Pecuaria Venegas, del municipio espirituano de Yaguajay
Quizás porque se sabe de sobra que sin asegurar la base alimentaria de los rebaños es imposible alcanzar el desarrollo ganadero, en la Unidad Empresarial de Base (UEB) Santos Caraballé, perteneciente a la Empresa Pecuaria Venegas, de Yaguajay, se destinan 29 hectáreas a la siembra de plantas proteicas para la comida animal.
Justo en la finca de semillas La Virtuosa, de ese centro, se plantan especies como la tithonia, tres variedades de king grass, cratylia, morera, moringa, leucaena y caña, las cuales benefician a productores de la UEB y a usufructuarios comprometidos con la entrega de leche.
Así lo explicó a Escambray José Carlos Rodríguez Guerra, director de la referida UEB, quien destacó que la presencia de estos ejemplares asegura el alimento del ganado en las diferentes vaquerías de la empresa, hecho que se dificultaba en etapas anteriores, pues tenían que adquirirlas en otras provincias.
“Este tratamiento que les damos a las vaquerías del Estado es igual para los usufructuarios. Tenemos 41 usufructuarios por leche, 14 por ganado en desarrollo y cuatro por ganado menor. También tenemos otras unidades de la empresa a las cuales les pasamos las plantas proteicas, fundamentalmente.
“Aquí tenemos trabajo todo el año. Hay muchas plantas establecidas, que el resto del tiempo es mantenerlas. No obstante, cuando no hay cultivos, estamos en la recogida de semilla o en la producción de ciclo corto. El trabajo nunca falta.
“Si nosotros no somos capaces de garantizar la base alimentaria es muy difícil que la ganadería salga adelante. Lo primero es asegurar esto; luego, completar las hembras de reproducción, mantener el buen estado de la masa e incrementar los niveles de producción que, en nuestro caso, es la leche. Por tanto, si no tenemos comida animal es imposible avanzar”, destacó Rodríguez Guerra.
De igual forma, puntualizó que, además de la siembra de alimento animal, dedican 2 hectáreas para la siembra de yuca y otros cultivos de ciclo corto, los cuales encuentran como destino la alimentación de los trabajadores del centro, de la UEB y la venta a la población.
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