FranciaParís, 7 may (Prensa Latina) Varios estudios realizados en Francia, y cuyas conclusiones fueron publicadas hoy, alertaron sobre la probable reactivación de la epidemia de Covid-19 si no se refuerzan las medidas de protección decididas por el gobierno para la fase postcuarentena.
Según los investigadores la estrategia planteada por el ejecutivo pondrá a Francia en dificultades para evitar una segunda ola de la epidemia, cuando a partir del 11 de mayo millones de personas abandonen el confinamiento para retomar sus trabajos.
Para el doctor Martin Blachier, experto en salud pública, en estos momentos ‘las medidas de barrera ya no pueden ralentizar la circulación del virus’, por lo que la única medida efectiva sería continuar el confinamiento, pues en caso contrario se reactivará la epidemia y ‘será aproximadamente del doble de tamaño de la que hemos conocido, con unos hospitales al límite’, dijo.
A su vez el estudio de Public Health Expertise citó que las deficiencias del plan gubernamental, como la ausencia de medidas reforzadas de protección para las personas más vulnerables y el regreso al trabajo y a las escuelas, provocarán un aumento de casos graves que superarán la capacidad de los servicios de cuidados intensivos, en un escenario previsto para finales de julio.
Otro modelo, realizado por el Instituto Nacional de Salud e Investigación Médica (Inserm) y la Universidad de la Sorbona, consideró necesario para evitar un segundo brote que la mitad de la población permanezca en sus casas, y que se reanude solo la mitad de las actividades previstas y la reapertura de comercios.
Según este estudio, si todos los estudiantes regresan a clase a partir del 11 de mayo los servicios de urgencia se verán desbordados, y resaltó la importancia de detectar y rastrear al menos la mitad de las nuevas infecciones que se produzcan para romper las cadenas de transmisión, o en caso contrario la segunda ola será más intensa que la primera.
En línea con estos informes el líder de Francia Insumisa, Jean Luc Mélenchon, declaró hoy que ‘el desconfinamiento se está produciendo en condiciones peligrosas’, y anticipó un deterioro en la situación sanitaria a partir del 11 de mayo, con precios tan altos en las pruebas del virus y las mascarillas que ‘para muchas familias son inalcanzables’.
Añadió que el gobierno desconoce tanto el número de personas que volverán a trabajar a partir del lunes, como el riesgo para la seguridad de los niños que regresarán al colegio, lo que consideró una temeridad y alertó de que el ‘contagio de la enfermedad empeorará’.