En el mostrador de Sabor mágico aumenta a diario la demanda de los consumidores, surtidos de alimentos con estándares de calidad superiores a los de establecimientos estatales y particulares
Por: Alexey Mompeller Lorenzo
De la fusión de tres emprendimientos surgió Sabor mágico, pequeña empresa privada cabaiguanense que fortalece la producción de alimentos, al posicionar en el mercado elaboraciones de panes y dulces para a corto plazo iniciar la manufactura y comercialización de derivados lácteos.
“Por el momento expendemos panes, masas de pizza, galletas, palitroques y dulces realizados en una sede de la entidad radicada en Sancti Spíritus. Ultimamos detalles para dentro un mes, aproximadamente, comenzar la elaboración de helados y demás productos obtenidos mediante el procesamiento de la leche”, precisa Ibrahim Valdivia Sánchez, socio principal de la mipyme con base en la rama cuentapropista.
La reconversión de diferentes negocios preexistentes consolidó el quehacer de esta forma de gestión no estatal, incluida entre los más de 40 nuevos actores económicos creados en el territorio para ampliar la prestación de bienes y servicios.
“Como alega nuestro eslogan, el objetivo es marcar la diferencia. Trabajamos con el 90 por ciento de la materia prima importada y al efectuar los pagos en el exterior, ello provoca que las producciones no tengan precios módicos”, manifestó.
En el mostrador de Sabor mágico aumenta a diario la demanda de los consumidores, surtidos con estándares de calidad superiores a los de establecimientos estatales y particulares. La mipyme que incorpora a su dinámica peticiones de otras entidades, recupera paulatinamente la vitalidad de un espacio arrendado a la Empresa Municipal de Comercio y Gastronomía.
“En este local, donde se ubica la sede de la empresa, radicará el centro de procesamiento del helado y una extensión de la industria de dulces. La inversión capital conllevó a ejecuciones sanitarias, hidráulicas, eléctricas y la reparación de la cubierta y el piso, acciones constructivas que sobrepasaron el tiempo y el presupuesto previstos. Teníamos seis meses de derecho libre de impuestos y ni si quiera pudimos acogernos a 30 días de esa bondad tributaria”, enfatizó.
A un año de alcanzar personalidad jurídica, a Sabor Mágico no le han faltado los obstáculos durante su despegue comenta Valdivia Sánchez; aunque en medio de las restricciones sobresale por generar oportunidades laborales. “Hemos afrontado situaciones ajenas a nuestra voluntad por problemas con la rehabilitación del inmueble y el montaje de los equipos. De una plantilla aprobada de hasta 35 trabajadores incorporamos a 14 empleados que devengan salarios acordes a las producciones y nos satisface poder ayudar a sus familias”, finalizó.
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