Debido al incremento de cabaiguanenses con un cuadro clínico deteriorado por presentar estas patologías relacionadas con la COVID-19, se acondicionó la Casa de Abuelos Alegre vejez, un apéndice de la Sala de Hospitalización del Policlínico I
Por: Alexey Mompeller Lorenzo
Entre las casi 400 capacidades habilitadas en Cabaiguán para el ingreso de positivos y sospechosos a la COVID-19, cuentan las del hospital de campaña encargado de garantizar el tratamiento a pacientes que, aunque su PCR resulte negativo en el momento del egreso, padecen las secuelas de la enfermedad.
“La Casa de Abuelos Alegre vejez constituye un anexo de la Sala de Hospitalización del Policlínico I donde se atienden casos con afecciones respiratorias, la mayoría diagnosticados con neumonía y bronconeumonía”, señaló el doctor Pablo Quintana Portal.
El galeno, uno de los facultativos del centro, precisó que con una cobertura para 19 personas, hoy tienen ocupadas la totalidad de las camas ante la virulencia de la cepa Delta del coronavirus SARS-CoV-2 identificada en el municipio.
“Aunque algunos pacientes muestran patologías asociadas que complican más el cuadro respiratorio, su evolución ha sido satisfactoria como la de otros que no poseen comorbilidades y exhiben un mejor pronóstico”, dijo Quintana Portal.
En la Casa de Abuelos Alegre Vejez, institución que en plena crisis sanitaria recibe a quienes presentan sintomatologías respiratorias derivadas de la pandemia, disponen de los medicamentos para asegurar la recuperación de estos cabaiguanenses.
“Contamos con oxígeno medicinal, esteroides y un nivel de antibióticos para completar el tratamiento”.
Sobre la conducta a seguir con los pacientes posCOVID en estado de gravedad, el especialista en Medicina General Integral (MGI) añadió que se trasladan hacia la Sala de Hospitalización o al Hospital General Provincial Camilo Cienfuegos.
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