Aferrado al tratamiento de la figura humana, el creador Junior Rojas Ferrer dibuja rostros que captan la cotidianidad de su pueblo lo cual muestra en la expo de la Jornada por la Cultura Cubana.
Por: Alexey Mompeller Lorenzo.
Poses atrapadas en carboncillo y grafito; trazos que empapan los lienzos. Cada una de las técnicas le atribuyeron a Junior Rojas Ferrer la potestad de cronicar sobre Cabaiguán y los perfiles de algunos de sus coterráneos tienen la palabra en Memorias, exposición atribuida al artista visual.
“Distinguen artífices del pincel, personalidades, personajes populares e integrantes de la familia, una suerte de síntesis de los trabajos que había captado antes”, alega.
La pequeña muestra que se exhibe en el contexto de la Jornada por la Cultura Cubana marca un después en el recorrido pictórico del autor, quien sin deslindarse de su inquietud temática, el tratamiento de la figura humana, presenta ahora mayor madurez creativa donde los rostros hablan.
“La carga emocional de los protagonistas me hizo apropiarse de su gestualidad, sonrisa, guiños. Incluso, a pesar de su marcada edad, algunos son capaces de mostrar total calidez”, acota el dibujante.
Las obras de este artista de la plástica provocan un viaje a las esencias de reconocidos y heterogéneos cabaiguanenses, confesiones en imágenes que acoge la galería del cine-teatro Rogelio Rojas.
Pero Memorias es solo un avance de ese discurso. “Un inicio de lo que pretendo sea un proyecto más abarcador. Partí de fotografías inéditas tomadas por mi lente y convertidas en dibujos que aspiro montar en una exposición mayor”, culminó el joven.
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