Inversiones en la subcuenca Tuinicú en áreas del municipio promueven alternativas para mitigar las consecuencias generadas por el cambio climático
Por: Alexey Mompeller Lorenzo
La restauración de los ecosistemas de la subcuenca Tuinucú, uno de los afluentes principales del río Zaza, ha contribuido al desarrollo forestal y a explotar las potencialidades agropecuarias de parte de esa extensión perteneciente a Cabaiguán.
El área de intervención comprende alrededor de 11 mil hectáreas del municipio señaló Aleida Yanes González, especialista de Ciencia, Innovación, Tecnología y Medio Ambiente (CITMA) en el territorio, escenario donde resultan palpables los logros de un proyecto provincial con financiamiento internacional que en el último lustro ha arrojado luz al análisis de la biodiversidad y de los recursos naturales bosque, agua y suelo en ese entorno.
“Distingue la creación de un vivero con especies forestales y frutales alcanzándose plantar 75 hectáreas alrededor del río y el embalse del mismo nombre y se fomentaron más de 300 hectáreas de ecosistemas silvopastoriles a favor de la ganadería. Destaca la construcción de cercas vivas y cortinas rompevientos y el manejo de 40 hectáreas de variedades exóticas e invasoras”, agregó la vocera del CITMA aquí.
Estrategias en beneficio de casi una veintena de cárcavas así como monitoreos para comprobar la fertilidad de las superficies aptas para cultivos y el montaje de un centro de producción de humus devienen prioridades de la iniciativa que apuesta por garantizar la seguridad alimentaria.
“Existen actores que participan y reciben las bondades: Cooperativas de Producción Agropecuaria (CPA) y Cooperativas de Créditos y Servicios (CCS) e involucra a las comunidades Santa Lucía, Cuatro Esquinas y Manquitas, entre otros asentamientos”, acotó.
Además de la reforestación de 75 hectáreas de la faja hidrorreguladora, el proyecto subcuenca Tuinicú en la geografía cabaiguanense promueve y apoya alternativas sostenibles para mitigar las consecuencias generadas por el cambio climático.
“Sobresale la ubicación de paneles solares en fincas forestales, el ajuste de dos biodigestores, la puesta en práctica en zonas rurales de equipos de bombeo mediante paneles solares fotovoltaicos y la creación de sistemas de cosechas de agua a través de la instalación de depósitos que permiten el aprovechamiento del líquido fluvial”, dijo Yanes González.