Por: Daisy Martín Ciriano
El inicio del siglo XX, sorprendieron a los vecinos de Cabaiguán y a sus zonas aledañas, con la agradable noticia de que se iniciaban las obras para la construcción del ferrocarril; esto ocurrió en el año 1901 y trajo como consecuencia, que nuevos emigrantes isleños llegaran al lugar, unos provenientes de las Islas Canarias y otros que se habían asentado con anterioridad, en zonas cercanas como Camajuaní, Remedios y Vueltas.
El día 23 de febrero de 1902, se inauguró el chucho del ferrocarril Central con un embarque de maíz hacia Santa Clara; así, Cabaiguán logró su primera vía de comunicación eficiente y comenzaron a realizarse envíos directos a La Habana.
Por otra parte, en ese propio año, se hizo pública a través de la prensa, una protesta de los vecinos por el antihigiénico corral de cerdos de la Cuban Company de ferrocarriles, que llenaba de pestilencia la atmósfera. Este hecho dio lugar a que los pasajeros habituales o de paso, repitieran jocosamente: ¡Hemos llegado a Cabaiguán, El Pueblo de los Verracos! como jocoso calificativo que ha trascendido hasta nuestros días.
A partir de ese lugar se generaron huelgas desde el propio inicio del siglo XX, la incipiente clase trabajadora demostró su inconformidad con diferentes situaciones que la afectaban de manera directa, como fueron: la huelga en julio de 1902, protagonizada por personal de las escogidas de tabaco, que exigió el reconocimiento de sus gremios; la protesta de este mismo sector, en 1909, relacionada con el tabaco en palo y las tarifas oficiales del salario en las escogidas; en ese propio año se unieron a la huelga los carretoneros, carpinteros, albañiles y otros, para exigir a la Cuban Company, el arreglo de la vía paralela al ferrocarril, la que fue satisfecha.
El 27 de marzo de 1951 año, partió desde allí, una manifestación con carteles y consignas, mostrando su desacuerdo frente a la estación de ferrocarril, por lo que la guardia rural trató de disolverla. En esa ocasión, las mujeres resultaron maltratadas por los soldados.
Durante la lucha contra la máquina torcedora, el 4 de julio de 1951, un grupo de obreros se dispuso a hacer una hoguera frente al ferrocarril, fue entonces que un soldado disparó y asesinó al empleado de comercio Alfredo López Brito que también se encontraba en el lugar.
Otro elemento de importancia vinculado al ferrocarril fue la inauguración de la nueva estación en 1957, la misma que se mantiene en la actualidad.
En la actualidad, Cabaiguán exhibe la condición de ser el único municipio de Cuba donde se unen la carretera Central, la Autopista Nacional y la línea del Ferrocarril principal, lo que sigue identificándolo históricamente como un centro vital de comunicaciones.