La complejidad epidemiológica apunta al Consejo Popular Jíquima de Peláez, epicentro de un evento de transmisión comunitaria que acumula 241 casos. En las últimas 24 horas sumó seis nuevos contagios de COVID-19
Por: Alexey Mompeller Lorenzo
Por esta fecha del mes anterior, Cabaiguán casi triplicaba los 898 casos positivos a la COVID-19 que se han confirmado en octubre, la incidencia de la enfermedad va en picada pero la propagación distingue sobremanera en las zonas rurales.
El evento de transmisión comunitaria abierto en Jíquima de Peláez continúa fértil, entre los nuevos diagnósticos identificados la víspera, seis corresponden a ese suceso que acumula 241 personas notificadas y nueve son pacientes activos.
Armando Ulloa Martínez, director de la Unidad Municipal de Higiene y Epidemiología, señaló que los 16 casos pertenecientes a la jornada del 24 de octubre se encuentran dispersos por todas las áreas de Salud de la geografía cabaiguanense y pese a la baja morbilidad, el SARS-CoV-2 no da tregua en los escenarios urbanos menos en las comunidades Juan González, La Macuca, El Saltadero, Carboney y Potrerillo, demarcaciones donde el nivel de infestación ocupa a las autoridades sanitarias.
“En la semana que recién culminó realizamos estudios poblaciones que arrojaron pacientes sintomáticos en varios términos de la localidad. De las 490 muestras tomadas para PCR, el 40 por ciento de estas resultaron positivas”, añadió.
La disminución de las cifras originadas a las puertas de la nueva normalidad lo evidencian los 759, 49 contagiados por 100 000 habitantes durante la quincena precedente, tasa que en las últimas semanas tiende a alejarse de la media provincial, indicador actualmente en 830, 38; sin embargo solo la prevención revertirá los dígitos de la pandemia.
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