La reapertura fue posible tras concluir acciones de reparación y mantenimiento en las que participaron actores económicos del sector no estatal
El salón de parto del Hospital Tomás Carrera Galiano del municipio de Trinidad reanudó sus servicios tras una rehabilitación integral que incluyó diferentes acciones constructivas y la mejora de las condiciones de esta área.
Decisivo resultó el aporte de actores económicos del sector no estatal, además del presupuesto destinado por la Dirección Municipal de Salud, utilizado en la adquisición y reparación de equipos de climatización.
Para el doctor Amaury Maure Hernández, especialista en Primer Grado en Ginecobstetricia, la reapertura de este servicio da respuesta a un reclamo no solo del personal sanitario que labora en la institución, sino también de la población femenina del sureño territorio.
“Contamos con mejores condiciones constructivas y de higiene para la atención materno-infantil. Ha sido una decisión muy acertada la de rehabilitar algo tan sensible como lo es este servicio”.
La reparación de la cubierta afectada por filtraciones, la mejora de las redes hidrosanitarias y eléctricas, la reposición de todas las luminarias, además de la recuperación de la lámpara central, en desuso desde hace varios años, sobresalen entre las labores ejecutadas por la mipyme El Niñi, una de las primeras en acudir a la convocatoria de las principales autoridades del municipio.
Magalys Conesa Soler es una de las titulares del emprendimiento y comentó su satisfacción al ver la obra terminada. “Es importante apoyar este tipo de proyecto a favor del bienestar de la población. Forma parte de nuestra responsabilidad social”.
En la rehabilitación de esta área del centro asistencial se emplearon recursos materiales, financieros y humanos. De acuerdo con Arael Escobar Fernández, administrador de la mipyme, el aporte asciende a unos 500 000 pesos, utilizados también en la adquisición de un microwave, una cafetera eléctrica, materiales de limpieza y otros insumos que facilitan las condiciones de trabajo de los trabajadores. “Hicimos el compromiso de mantener una atención sistemática”, agregó.
La puesta en servicio del salón de parto constituye el primer objeto de obra concluido con la colaboración del sector no estatal. Los trabajos garantizan que se cumplan todos los protocolos sanitarios y se alcancen indicadores de excelencia.
“Si bien el salón de parto estuvo cerrado durante casi dos años, el servicio de ginecobstetricia se reorganizó en la unidad quirúrgica y se lograron resultados muy favorables en el 2024; entre ellos cero mortalidad infantil y materna, cero hipoxias y muertes intrapartos. Eso evidencia la entrega de todo nuestro equipo, agregó el doctor Maure Hernández.
La licenciada en Enfermería Rita María Escobar Reguera se ha desempeñado en el servicio por más de 40 años. Nadie como ella para enaltecer el alcance de esta idea a favor del bienestar colectivo. (Fuente: Escambray)
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