Si la honradez tuviera apellido, ese sería Agramonte
Si la bondad tuviera rostro, si la honestidad tuviera cara; sin lugar a dudas fuera la de Jorge Agramonte Sánchez. Imposible estar ajeno a sus carcajadas, al trato cargado de respeto a sus regaños que parecían caricias.
Por: Aramis Fernández Valderas y Daisy Martín Ciriano
Jamás podré olvidar esos dientes tan blancos que sobresalían del rostro tan negro, jamás podré tocar la puerta de mi casa sin recordar que me le hizo el último arreglo. Los años no te detenían maestro del barniz y la carpintería fina, tampoco te apartaban de esas raíces tan bien plantadas en Cabaiguán, pueblo del que te llevas un gran pedazo a la gloria.
Agramonte, sin proponértelo, el pueblo te distingue, cada cual te lleva en su corazón. Llegaste a la vida atado a la historia y la Cultura el 20 de octubre ...