José Martí: Guía espiritual de su pueblo
Aquellos disparos anunciaron el desastre en
Dos Ríos. Cuba tembló. Fue la última decisión de José Julián Martí Pérez y
aunque le advirtieron quiso ser un relámpago en la batalla como mismo lo era
cuando se le amontonaban los versos, dialogaba con los tabaqueros o se despertaba
en la noche para concebir su país.
Fue mambí por un día sin desenfundar el revólver
y el machete. Sobre el caballo que sintió la cercanía de la muerte cabalgó el
Apóstol y resultó el blanco del enemigo. Con 42 años pensó por un siglo y en el
presente tiene voz el fundador del Partido Revolucionario Cubano.
Antes de que su pluma brillara en “Patria”, a
Pepe lo leían desde los intelectuales hasta los niños. El hombre que con su
verbo sedujo a las señoritas lo mismo arengaba un combate con esa prosa fina,
que cr...