A jugar pelota
Foto: Lillipsy Bello Cancio
Lo mismo en el campo que en la ciudad, el amor
por el béisbol no cesa. No importa el material de la pelota, el color de los
trajes o la madera del bate, en un abrir y cerrar de ojos se confeccionan los
equipos, aparecen los árbitros improvisados y se escucha la voz de ¡A Jugar!