En Yaguajay se realizan diversas acciones, sobre todo en la llanura costera, por ser el área de mayor prioridad para el territorio, debido a su marcada vulnerabilidad
En tiempos en los que los efectos del cambio climático se hacen cada vez más palpables, la implementación del Plan de Estado para el Enfrentamiento al Cambio Climático (Tarea Vida) resulta urgente.
Bajo esta premisa, en Yaguajay se realizan diversas acciones de una punta a la otra del municipio, sobre todo en la llanura costera, por ser el área de mayor prioridad para el territorio, debido a su marcada vulnerabilidad.
Así lo explicó a Escambray Yeny Morales Pérez, especialista del Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente (Citma) en el norte espirituano, quien destacó que, ante la transversalidad de los problemas medioambientales en la zona, las estrategias de mitigación se introducen en los planes de las diversas entidades del territorio, con énfasis en aquellos sectores priorizados como la Agricultura y otros vulnerables al impacto del cambio climático.
Morales Pérez apuntó que hasta la fecha se han actualizado los estudios de peligro, vulnerabilidad y riesgos, inundación costera y fuertes vientos, así como el Modelo de Ordenamiento Ambiental (; en tanto, se confeccionó y se puso a disposición de todos el Plan de Adaptación al Cambio Climático, herramienta que favorece la articulación entre todos los actores del municipio.
De igual forma, resaltó que se ha trabajado en la reforestación o rehabilitación de 228 hectáreas, entre manglares y fajas forestales hidrorreguladoras, en la limpieza y desobstrucción de 42 kilómetros de canales— que ha beneficiado a habitantes de la cabecera municipal afectados por las inundaciones— y se han monitoreado atributos ecológicos claves del humedal Ciénaga de La Guayabera.
La especialista del Citma aseveró que los resultados del monitoreo en el manglar demuestran que la supervivencia de la regeneración natural y asistida está por encima del 85 por ciento, mientras que los cuerpos de agua poseen condiciones favorables para el desarrollo de la biodiversidad.
Asimismo, subrayó que la Tarea Vida también ha llegado a las comunidades, con acciones precisas en 22 patios y cinco fincas de la localidad de Vitoria. Dichas labores, dijo, impactan en el orden social, ambiental y económico.
Por otra parte, recalcó que se construyeron cuatro parques solares fotovoltaicos con una capacidad de potencia instalada de 10.95 megawatts; se instalaron 14 módulos solares para beneficio de 14 familias de áreas rurales y ocho módulos de paneles solares fotovoltaicos para mejorar el abasto de agua en comunidades vulnerables.
En esas circunstancias, reconoció el apoyo del proyecto internacional Resiliencia Costera, el cual contribuyó a la creación de capacidades humanas y materiales para cumplir las metas propuestas, y el valor de la comunicación para garantizar la información de los diversos actores del municipio.
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